El sector forestal en Córdoba: un pilar de desarrollo

La producción forestal en los climas tropicales representa una opción muy importante en el uso de tierras; que, con una buena planificación, se aprovechan tanto para la producción con fines comerciales, como para la protección del ambiente.
Para Colombia, los bosques son un activo importante, puesto que a partir de la industria forestal se derivan diferentes actividades económicas, las cuales generan empleo y dinamizan la vida en el campo y oportunidades para estas regiones rurales.
Córdoba es un departamento con una gran riqueza forestal, gracias a su variada fisiografía y sus ventajas hídricas, que permiten el crecimiento de plantaciones de diferentes tipos de especies. De hecho, el departamento cuenta con un total de 1.305.813 de hectáreas con aptitud forestal, de acuerdo a la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria – UPRA
De ese más de millón de hectáreas, el 29,2%, que equivale a 730.284 hectáreas, tiene una aptitud forestal alta, mientras que el 14% (360.226), tienen una aptitud media y el 8,6% (215.304), tienen una aptitud baja. Lo que muestra que, de todo el suelo apto para plantación forestal, la mayor parte tiene óptimas condiciones para las plantaciones.
Dentro de las especies con mayores áreas de plantación comercial en Córdoba, se encuentran la Acacia Mangium (12.975 ha); la Tectona Grandis o Teca (8.744 ha); Eucalyptus urograndis o Eucalipto rosado (2.126 ha); y otros como la Tabebuia rosea, más conocido como guayacán y Eucalyptus urograndis o caoba. Variedades que tienen un gran mercado internacional y que en este suelo se cultivan de forma óptima.
Angélica Benedetti Chica, directora ejecutiva de ProMontería, asegura que “estas cifras representan una gran oportunidad para Córdoba, no sólo por la monetización del recurso de madera y sus derivados, sino también por la contribución que tienen las plantaciones comerciales en la lucha contra el cambio climático, concretamente captura de carbono, uso de madera aserrada para sustitución de hormigón, y uso de pulpa de la madera para reemplazar para fibras textiles sintéticas, entre otras. Es por esto que uno de los sectores priorizados para ProMontería, para la atracción de inversión al departamento, es el sector forestal”.
De acuerdo al último boletín forestal, de 2022, el mercado forestal en Colombia se estima en US$1.889 millones, a precios corrientes del 2021, lo que equivale a 0.69% del PIB. La oferta actual de madera se calcula en 3 millones de metros cúbicos en la cual, las exportaciones tienen una participación de 24.5% del consumo de madera del país; pero, según cálculos de Fedemaderas, con un millón de hectáreas plantadas, en cuatro años se podría suplir el 75.5% restante, generando una contribución de la industria del 1,4% al PIB, y en treinta años, con 7.2 millones de hectáreas establecidas, se podría obtener un nivel de exportaciones equivalente a 44% de las actuales exportaciones de carbón.
“Según la CEPAL Colombia carece de una política pública estratégica integral y dedicada para el desarrollo de su bioeconomía. El aporte del sector forestal y de la transformación de la madera y sus derivados, puede medirse por la aptitud forestal de más de 7,5 millones de Ha de alta aptitud según la UPRA. El departamento de Córdoba actualmente es la cuarta región con mayor número de plantaciones forestales comerciales (36 mil Ha) aportando un 6,7% a las poco más de 538 mil Ha con que cuenta el país para atender la demanda interna, pero podría expandir sus fronteras a ocupar buena parte de las 730 mil Ha con alta aptitud, con lo que se multiplicarían por más de 20 los beneficios en materia ambiental, social y económica de la región. Con corte a 2021 el departamento contribuyó con el 2% del volumen movilizado a nivel nacional, es decir 63 mil M3, 97% proveniente de plantaciones forestales comerciales. Al igual que sucede en otras regiones del país, una visión integral del uso del recurso forestal permitirá generar un motor de desarrollo económico que en 20 años casi que duplicaría el aporte del sector cafetero a la economía nacional.”, puntualiza Juan Miguel Vásquez. Director Ejecutivo Nacional de FEDEMADERAS.
Pero el impulso del sector forestal no solo beneficiaría a la economía del país, sino que también tendría un gran impacto ambiental, siendo un motor de desarrollo sostenible. Actualmente en Colombia, son 33 millones de hectáreas dedicadas a ganadería extensiva, mientras que lo recomendable sería la tercera parte de esto; el resto debiera dedicarse a agricultura y a sistemas silvopastoriles, siendo la reforestación comercial, una enorme oportunidad para el país en este sentido. Adicional a esto, las plantaciones forestales comerciales son, además, una de las más claras estrategias para propiciar la creación de industrias de economía circular y crear encadenamientos productivos en cadenas de valor locales, regionales y globales.
De hecho, para inversión en el sector forestal hay diferentes opciones y oportunidades:
- Ampliación del área forestal sembrada en el país, aprovechando los 14,1 millones de hectáreas con potencial con el que cuenta el país para el desarrollo de plantaciones forestales con fines comerciales, de las cuales, Córdoba posee el 8%.
- Con el fin de combatir los efectos del calentamiento global originados por actividades industriales, Colombia ha generado mecanismos de inversión en proyectos ambientales que reducen las emisiones de gases efecto invernadero, mediante el mercado de bonos o créditos de carbono.
- Plantas de fabricación de tableros y acabados de madera para la industria de la construcción, fábricas de carpintería arquitectónica, muebles para el hogar y oficina.
Córdoba tiene, sin duda, un potencial enorme en el sector forestal, por el cual ProMontería trabaja para dar a conocer a nivel internacional, siendo este uno de sus sectores priorizados para la atracción de inversión en el departamento por la agencia, teniendo la certeza de que puede ser uno de los grandes pilares de desarrollo de la región y con la capacidad y proyección de aportar al crecimiento del país.
Incentivos tributarios para el sector forestal
Actualmente el sector forestal cuenta con importantes incentivos tributarios, con el fin de fomentar su crecimiento en Colombia. Los tres principales estímulos en Colombia para la inversión en plantaciones forestales son: El Certificado de Incentivo Forestal – CIF, el Incentivo a la Capitalización Rural – ICR y las exenciones tributarias:
Certificado de incentivo forestal: El Certificado de Incentivo Forestal (CIF) es un reconocimiento del Estado a las externalidades positivas generadas por la reforestación. Este incentivo aporta hasta el 50% en efectivo de los costos de siembra de plantaciones forestales nuevas con fines comerciales en áreas productoras, en terrenos con aptitud forestal y en predios de personas naturales o jurídicas. Adicionalmente, del segundo hasta el quinto año se reconoce hasta un 50% de los costos del mantenimiento de la plantación. Su fin es promover la realización de inversiones directas en nuevas plantaciones forestales de carácter protector-productor en terrenos de aptitud forestal.
Incentivo a la capitalización rural – ICR: Es un beneficio económico que se otorga a una persona natural o jurídica, que en forma individual o colectiva ejecute un proyecto de inversión nuevo, con la finalidad de mejorar la competitividad y sostenibilidad de la producción agropecuaria y de reducir sus riesgos de manera duradera, previo el cumplimiento de ciertos requisitos y sujeto a la disponibilidad de recursos del Programa.
Es un abono que realiza FINAGRO al saldo del crédito contraído por el beneficiario para financiar las actividades de inversión objeto del incentivo. Los pequeños productores pueden acceder a una condonación del capital de hasta el 40% del valor del proyecto, y los medianos y grandes productores se benefician con una condonación de hasta el 20% del valor del capital.
Exenciones tributarias: Las exenciones tributarias hacen referencia a un descuento sobre el pago del impuesto de renta durante un período determinado de largo plazo. En Colombia, esta exención se aplica básicamente a las plantaciones forestales establecidas con fines comerciales e implica un mejoramiento en el flujo de caja de los proyectos que varía entre un 24% a 30% de los beneficios percibidos, ya que se reduce el impuesto de renta aproximadamente en dichos montos.
Estos incentivos son el resultado del trabajo que las distintas organizaciones que representan el sector forestal en el país vienen haciendo, en busca de mejorar las condiciones para la inversión en este para su crecimiento